Es normal que la primera consulta al dentista provoque cierto nerviosismo. Sea un niño o un adulto, la persona no sabe qué hará el profesional en su boca. Hay una especie de miedo a que la experiencia sea dolorosa y a que resulte desagradable.

Los niños reaccionan más confiadamente, porque la persona que los lleva se ocupa de tranquilizarlo antes. Basta decirle ‘Solo te mira, controla que todo esté bien’ para que el miedo desaparezca y la consulta sea vista como normal. Además, hay cuentos con imágenes que hacen que esta primera visita al dentista se vea como amigable y necesaria.

¿Cómo comienza la primera consulta al dentista?

Normalmente, se trata de una visita de diagnóstico. El profesional se tomará el tiempo necesario para controlar minuciosamente la boca.  La historia clínica general del paciente es importante, por lo que el odontólogo realizará preguntas para conocerla. 

Saber si el paciente tiene alergias y conocer la medicación que está consumiendo es imprescindible en esa primera consulta.  La existencia de diabetes, de enfermedades cardiovascurales, de hipertensión arterial, también condicionará el proceso y los posibles tratamientos.

Por lo tanto, parte de esa primera consulta al dentista será de diálogo, de preguntas a las que el paciente debe responder con todos los detalles.

¿Y la boca?

Después de la entrevista para conocer la historia clínica, el odontólogo se dedicará específicamente a la boca. Realizará una revisión general a partir de la exploración detallada. No solo observará los dientes y encías, sino también la lengua, los labios, las mejillas, las glándulas salivales, el paladar.

También observará el estado de la mordida del paciente, para conocer si se cumple adecuadamente la función de masticación. Palpando la mandíbula, el dentista captará si la articulación y los movimientos son correctos.

En este control, el facultativo dental detectará o descartará el bruxismo. Es este un hábito muy extendido de apretar los dientes; generalmente el paciente no se da cuenta de que lo tiene, las piezas dentales se desgastan y se aflojan.  Esta primera consulta al dentista, es el momento más adecuado para empezar corregir este problema.

Hay profesionales que utilizan pequeñas cámaras y radiografías si lo creen necesario. Esto ocurre especialmente cuando observan algún rasgo que evidencia anormalidades.

¿Y después?

El dentista ha reunido ya la información general acerca de la salud en general y de la salud bucodental en particular de su paciente.  Ahora tendrá un diagnóstico personalizado. Si observó problemas, propondrá el tratamiento.

Si el profesional considera que hay acciones de prevención que el paciente debe realizar, se lo comunicará.  Seguramente le hablará de la importancia de la adecuada higiene dental y le indicará la mejor forma de realizarla.

En la primera consulta al dentista no hay pinchazos ni tratamientos dolorosos.  Por todo ello, hay que quitarse los miedos. En nuestra Clínica Dental Perio & Implant contamos con la más avanzada tecnología y un equipo humano con formación y amplia experiencia. Trabajamos diariamente con el objetivo del bienestar de nuestros clientes.